¿Alguna vez saliste de un masaje sintiéndote increíble… pero al día siguiente, todo volvió a lo mismo? No estás sola. Muchas personas no obtienen todos los beneficios del masaje simplemente porque no saben cómo prepararse adecuadamente ni qué hacer después de la sesión.
En este artículo te explicaremos de forma clara, cercana y profesional qué hacer antes y después de un masaje para que realmente marque la diferencia en tu bienestar. Ya sea que recibas masajes relajantes, maderoterapia o tratamientos terapéuticos, seguir estas recomendaciones hará que tu experiencia sea mucho más efectiva.
¿Qué es un masaje terapéutico y por qué cuidarse antes y después?
Un masaje terapéutico no es solo un momento de relajación. Es una técnica que actúa profundamente sobre músculos, circulación, sistema nervioso y emocional. Puede ayudarte a:
- Liberar tensiones acumuladas.
- Mejorar el flujo sanguíneo y linfático.
- Aumentar la flexibilidad muscular.
- Reducir el estrés y la ansiedad.
Sin embargo, para que estos beneficios se mantengan, tu cuerpo necesita estar preparado antes y también ser cuidado después. Piensa en un masaje como un «reseteo» del cuerpo: si no haces lo correcto antes y después, vuelves a cargar el sistema con los mismos problemas.
Qué hacer antes de un masaje para aprovecharlo al máximo
Aquí te dejamos una guía clara y práctica:
1. Hidrátate bien
El agua es esencial para preparar tus músculos y tejidos. Estar bien hidratada mejora la circulación y ayuda a que las toxinas liberadas durante el masaje se eliminen más fácilmente.
2. Evita comidas pesadas
¿Harías ejercicio justo después de comer una hamburguesa? Pues lo mismo aplica aquí. Ir con el estómago lleno puede hacerte sentir incómoda y distraerte de la experiencia.
3. Dúchate si puedes
No solo por higiene. Una ducha caliente ayuda a relajar los músculos y abre los poros, preparando el cuerpo para recibir mejor el masaje.
4. Llega con tiempo y sin prisa
Si llegas apurada o estresada, te tomará más tiempo relajarte. Intenta llegar al menos 10-15 minutos antes, respira profundo y desconéctate del exterior.
5. Comunica tus necesidades
No todos los masajes son iguales, y tu cuerpo cambia día a día. Comenta al profesional si tienes alguna molestia, contractura o simplemente deseas relajarte.
Beneficios de preparar y cuidar tu cuerpo alrededor del masaje
Tomar en serio lo que haces antes y después del masaje puede potenciar enormemente estos beneficios:
- Mayor eliminación de toxinas gracias a la correcta hidratación.
- Reducción del dolor postmasaje, sobre todo si se trata de terapias profundas como la maderoterapia o el masaje deportivo.
- Mejor recuperación muscular tras actividad física.
- Efecto relajante más duradero, tanto físico como mental.
- Menor inflamación o incomodidad si aplicas técnicas postmasaje adecuadas.
Qué hacer después de un masaje para prolongar sus efectos
Aquí es donde muchas personas fallan. Te dejamos una lista con lo que SÍ debes hacer:
1. Vuelve a hidratarte
Durante el masaje, se estimula el sistema linfático, y el cuerpo comienza a liberar toxinas. El agua ayuda a eliminarlas de forma eficiente.
2. Descansa (si puedes)
Evita hacer ejercicio intenso después. Tu cuerpo necesita un tiempo para procesar lo trabajado. Un baño caliente, una siesta corta o simplemente estar tranquila es lo ideal.
3. No comas en exceso
Tu digestión aún puede estar un poco más lenta tras el masaje, especialmente si fue muy relajante. Come algo nutritivo pero liviano.
4. Evita el alcohol o cafeína
Ambos deshidratan y dificultan el proceso de limpieza del cuerpo. Lo mejor es evitarlos por al menos 12 horas.
5. Escucha tu cuerpo
¿Sientes algo de sensibilidad en ciertas zonas? Es normal, sobre todo con técnicas intensas como el masaje descontracturante o la maderoterapia. Si el dolor persiste más de 48 horas, consulta con tu terapeuta.
¿Usas maderoterapia? Algunos cuidados adicionales
Si estás explorando los beneficios de la maderoterapia, estas recomendaciones también aplican, pero con algunas variantes:
- Aplica aceites naturales hidratantes después de la sesión para nutrir la piel.
- Evita exponerte al sol en las siguientes 24 horas.
- Puedes usar una bolsa de agua fría si alguna zona queda inflamada.
- No hagas otra sesión muy pronto; deja al menos 48-72 horas entre sesiones.
Productos recomendados para potenciar tu experienci
Estos elementos pueden ayudarte antes o después del masaje:
- Aceites esenciales relajantes: como lavanda, romero o eucalipto.
- Rodillos de madera o masajeadores caseros.
- Velas aromáticas o difusores para crear un ambiente propicio.
- Sales de baño o aceites de ducha relajantes.
Precauciones o contraindicaciones a tener en cuenta
Aunque los masajes son en general seguros, hay momentos en los que deberías evitarlos o consultar antes:
- Si estás embarazada (consulta un especialista en masajes prenatales).
- Si tienes fiebre, infecciones, heridas abiertas o quemaduras.
- Si tomas anticoagulantes o tienes problemas de circulación graves.
- Si acabas de hacer ejercicio intenso o tienes una lesión muscular reciente.
